La pintura antimanchas llega a los hogares para resolver los problemas domésticos, que suelen ser habituales cuando los niños más pequeños entran en acción. Quien más, quien menos, ha vivido esa extraña sensación que se experimenta al ver a uno de los peques pasando por una pared recién pintada sus manos manchadas de tomate, mantequilla o chocolate.
Un malestar que ya no tendrá razón de ser, que va a pasar a mejor vida, porque la nueva pintura para el hogar, elaborada con partículas de silicato y resina de última generación, no se desnaturaliza cuando se ‘lava’.
Lo resiste todo
Por mucho que se frote con un trapo húmedo, no ocurrirá lo que sucedía antaño; con este nuevo producto, ya no quedará una aureola alrededor de la superficie sometida.
Una vez terminada la limpieza, nadie, por mucho que se fije, podrá sospechar que minutos antes se había producido un incidente.
Se podrá limpiar prácticamente todo, manchas de barro, ketchup, café o cerveza. Incluso, se puede restablecer la normalidad aunque los pequeños de la casa hayan cogido rotuladores, bolígrafos o lápices de colores y se hayan puesto a hacer trazos por la pared.
Se acabaron los problemas de humedad en las paredes
También resulta muy eficaz para atacar el problema que se suele producir en interiores ubicados en poblaciones con mucha humedad. Con esta nueva pintura, ya no habrá que temer la aparición de esas manchas tan molestas que afeaban tanto las paredes. Y es que estamos hablando de una pintura con hidrocarbonatación, resistente al agua y la humedad. Y que cuando se moja no genera olor de ningún tipo.
Con la pintura antimanchas todo son ventajas, como con el bricolaje. Ofrece una asombrosa variedad cromática de alrededor de 100.000 colores, gracias a un sistema tintométrico multicolor capaz de conseguir toda esa cantidad de tonalidades de forma instantánea.